Acabado el tercer día del triduo comenzaba el pasado domingo la Función Principal de Instituto, cuidada hasta el último detalle. Mientras el coro parroquial entonaba el primer canto, partía de la sacristía la procesión de entrada, formada por la cruz parroquial y dos ciriales, dos acólitos portando incensario y naveta, dos pequeños monaguillos con la ropa de salida de la cofradía y el celebrante, D. Enrique Soler Gil, párroco de San Juan Grande y Ntra. Sra. de la Candelaria de Jerez y Delegado Diocesano de Patrimonio. El Hermano Mayor y el Presidente de Cáritas fueron los encargados de proclamar las lecturas. Tras una larga homilia, el Secretario pronunció la Protestación de Fe, y los miembros de la Junta de Gobierno subieron al presbiterio para besar el Evangelio. La Oración de los Fieles fue leída por el también hermano, Juan Arellano, Diputado de tramo del cortejo del Cristo. Tras la bendición final se le impuso la medalla al nuevo vestidor y a cinco costaleros de los pasos del Cristo y de la Virgen respectivamente, sencillo gesto que suele hacerse cada año por orden de antigüedad. Para finalizar se entonó un canto a la Virgen. El celebrante bajó a incensar la imagen y abrió el tradicional besamanos.